lunes, 24 de mayo de 2010

Picu´l Mosquital (1.287m) El mejor mirador de los Lagos de Covadonga

Raquel llevaba tiempo diciéndome que quería conocer los Lagos de Covadonga. La otra vez que fuimos nos pilló una de sus famosas nieblas y no vimos nada.Pues nada, a mandar. Estuve mirando mapas, guías y consultando Internet y al final opté por hacer una ruta hasta Vegarredonda, Ordiales y según estuviera la nieve y las fuerzas, al Pico Cotalba. Ésa fue mi primera incrusión en Picos de Europa hace ya un porrillo de años y, la verdad, es que tenía ganas de recordarla. A lo mejor mi hermano Íñigo guarda alguna diapositiva de aquel entonces. Le preguntaré, a ver si podemos darle vidilla a la sección "Aquellos maravillosos años...".
El caso es que una vez los elementos se confabularon contra nosotros y por la mañana Raquel no se encontraba bien así que nada de madrugar, a ver si se pasa y ya iremos más tarde... Más tarde fueron las doce del mediodía, la hora a la que salíamos de Torrelavega y las dos y pico cuando llegamos al Santuario de Covadonga. Sin embargo, esta vez nuestro nisio proceder jugó a nuestro favor. La carretera de los Lagos estaba cortada hasta las tres por una prueba ciclista, así que mientras cientos y cientos de sufridos bicicleteros terminaban su subida y bajada a los Lagos, nosotros comimos tranquilamente. Cuando abrieron la carretera subimos y dejamos el coche en el aparcamiento de la Buferrera.
Con los planes a hacer puñetas, decidimos aprovechar la tarde y dar un paseo por la zona, que hacía bueno. Sobre las cuatro de la tarde empezamos la ruta siguiendo las marcas de PR por este camino enlosado...
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...y con escaleras y todo no siendo que algún dominguero se manche las zapatillas blancas o sufra un desafortunado accidente... en fin. Hace mucho que no venía por aquí, porque no recordaba yo esto así.
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En medio de una horda de alemanes vamos recorriendo el camino sobre las minas de Buferrera...
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Y en menos de veinte minutos, como indica en el cartel, ya nos asomamos al Lago de la Ercina, y todo el Macizo Occidental al fondo. Pero ¡qué bonito es esto!
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Seguimos el paseo por la senda que bordea el lago...
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...al otro lado pastan las vacas...
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Llegamos a esta majada de postal, Las Reblagas, dice el señor Adrados que se llama...
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...y tras perder de vista el lago, decidimos subir al Mosquital, el pequeño pico que hay entre el lago de Enol y el de la Ercina, seguro que desde ahí arriba las vistas son mejores.
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A pesar de que el calor aprieta, vamos con buen ritmo hacia arriba, es corta y si evitas los espinos y el lapiaz se va medio bien...
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...en menos de media hora coronamos un colladín y enfilamos la cresta, que si desde abajo parecía que iba a ser más afilada, ahora vemos que es suave y fácil. Al fondo vemos el vértice geodésico de la cima.
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Abajo, hacia el norte, están los dos aparcamientos. El bullicio de la gente se oye hasta aquí arriba.
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Ya sólo falyan unos pocos metros, procurando no molestar a las señoras vacas...
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...y ya estamos arriba.
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Foto para nuestro insigne patrocinador el Bar Llamas.
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Y un vídeo circular para que os hagáis una idea de las vistas.

Y ahora foto a foto para no perder detalle. El Lago de la Ercina.
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El Lago de Enol.
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El Macizo Central, con Torre Cerredo ejerciendo su supremacía.
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Y otra postal típica de Picos.
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En fin, vamos para abajo que hay que llegar a Oviedo a tirar unas sidras. Consultamos el mapa y dudamos si bajar continuando la cresta hacia el Lago de Enol o buscar el descenso hacia la vertiente norte. Cuando empezamos a bordear el lago de la Ercina me pareció ver un embudo que acababa en una pequeña canal que tenía pinta de poder hacerse... efectivamente, íbamos directos a meternos en un huerto. De momento saltábamos felices por el lapiaz, a Raquel este terreno le divierte.
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Nos toca hacer alguna pequeña destrepadita que Raque resuelve con esta elegancia, apunta maneras para lo que nos espera mañana.
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...seguimos bajando por esta llambria que acaba en un paredón. Pero me asomo a la derecha y veo una vira por la que parece que se puede pasar. Nos acercamos y le echamos un vistazo de cerca. Son unos cinco metros, la pared desploma un poco y la vira está un poco inclinada y tiene como medio metro de ancho.
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Al final me meto yo primero, hay algún agarre bueno para las manos, pero acabo arrastrando el culo buscando la seguridad de debajo del desplome. Raquel me sigue y con mi ayuda pasamos el primer tramo sin más problema que unos extraños bultos debajo de la garganta. Un pequeño ensanche con buenos pies y manos nos deja en otro tramito que paso arrastrándome, esta vez de cabeza. Aquí ya hay menos altura y Raquel, después pasa sentada, asegurada por mis manos desde abajo. Así de sonriente posa Raquel después de nuestra "pequeña hazaña". No era difícil, sí expuesto, había que echarle un poco de valor, sangre fría y a por ello. Sí señor, mi santa esposa me sorprendió muy gratamente.
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Desde abajo, vemos la llambria a la izquierda y la evidente vira por la que transitamos para no tener que volver a subir otra vez y bajar por el otro lado. El que diga: "¡bah, eso se destrepa!", que se acerque por allí y haga el favor de grabarlo en vídeo.
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Ya bajando por el senderito hacia el Lago de Enol, íbamos recordando cada momento como unos chiquillos que acaban de jugar un partido de fútbol en la playa
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Por cierto, que esa montañita, la Porra de Enol, era otra de las opciones del día, incluso para hacer un doblete con el Mosquital, pero viendo la hora que era decidimos continuar hacia el coche.
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Otra vez por en camino enlosado hacia el aparcamiento donde teníamos el coche tres horitas después de haber salido. Ya digo, un paseo, aunque eso sí, con su aliciente.
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...y antes de bajar, nos tomamos una merecida cerveza la cumbre del día a nuestra espalda.
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Así nos despedía cuando ya enfilábamos la carretera hacia abajo. Gracias y buenas tardes.
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7 comentarios:

Cienfuegos Caleyeru dijo...

Tu sabes lo de en casa del herrero, ¿no?, pues lo dicho. Ese pico no lo he subido yo nunca. Mira tú por donde, y bien guapo que parece. Por cierto que ese sábado me pilló a mi el corte por la clásica ciclista a los lagos, a las puertas de Cangas. Joer, 3.600 ciclistas pasadno se hace pelin largo, no veas. A nosotros tambien se nos fueron los planes a tomar pol saco. Te voy a dedicar la entrada cuando la suba para que veas que de nisios esta el mundo lleno, ja, ja.
Un saludo majos

Gabi dijo...

Con cualquiera de las fotos se podria montar una bonita postal, todo muy"gonito".
Un saludo.

Carzum dijo...

Jo, qué recuerdos, Borja, en mi época de senderista -hace mil años ya- acampé muchas veces cerca de los lagos. Abrazos pa su señora esposa, compañero! ;-)

Keducc dijo...

Como me gustan los lagos. Tienen un encanto tremendo. Os ha quedado un pateo muy interesante y con gran final. Enhorabuena!!!

Rafa Solanilla dijo...

Totalmente de acuerdo, excelente mirador sobre los lagos y buena vista también de Picos.
La cerveza, un clásico, tuvo que sentar demiedo.
Saludos.

Vidal dijo...

¡¡¡Enhorabuena pareja!!!... vaya recuerdos más chulos que me has traído compañero nisio... esa misma cumbre la subí sin saber como se llamaba cuando nos llevó Pepe a los Picos por primera vez, veníamos de la Vega de Ario y se ve que a mi me quedaron ganas de subir alguna cuesta y me decidí por esta bella cumbre en travesía desde el Ercina hasta el Enol donde se estaba bañando (cuando todavía se podía, je, je, je) toda la tropa... ¡que guapos los Picos!... un abrazo esgallero pareja!!!...

teo dijo...

Hola Borja. Las fotos muy buenas. Asturias es garantía de satisfacción para todo aquel que le guste la montaña. Preciosos contrastes en los lagos, verde, agua, la nieve de las montañas, todo muy idílico hasta las baques.
Borja me acuerdo mucho cuando viniste a cubrir las noticias de Fontaneda. Carlos me ha hablado muy bien de ti y te agradezco que me tengas entre los blog de los montañeros. He seguido muchas de vuestras andanzas. Enhorabuena.
Un saludo, Teo