La segunda noche en la Cordillera Blanca transcurrió con frío pero con una tranquilidad increíble. Cuando el sol comenzó a salir comenzamos a disfrutar de unas vistas impresionantes. La montaña que aparece en la fotografía recuerda mucho a la silueta del pico de la Paramount Pictures. Es el Artesonraju (6.025m.)
A nuestro alrededor unas montañas impresionantes y junto a nosotros unos animales adorables: Chiquito y Francisco seguían tan cariñosos como siempre.
Esta jornada la protagonista iba a ser una de las principales montañas de la Cordillera Blanca, el Alpamayo (5.947m.). Desde donde nos encontrábamos ya comenzaba a poder atisbarse este picazo
Y tras caminar durante una hora aproximadamente en dirección al pico, conseguimos contemplar por fin el Alpamayo en todo su explendor y eso que había una niebla del carajo que casi nos impide poder ver la montaña!!
Continuamos el camino hacia el Alpamayo desviándonos por la quebrada de Arhuaycocha desde donde ascendimos por un zigzagueante camino de herradura hasta alcanzar el campo base del Alpamayo. Como el día estaba un poco feo nos encontramos con algunos montañeros que estaban intentando subir al pico pero que habían tenido que desistir y dejarlo para el día siguiente.
Nosotros con haber llegado hasta el campo base nos dábamos por satisfechos! (aunque siempre da un poco de envidia ver como se preparan para alcanzar una cima como esta... sobre todo, porque no parecía tan complicado como otros picos que habíamos ido viendo durante la caminata...Al parecer, en dos días llegas a la cumbre.)
A una media hora del campo base del Alpamayo, se encuentra un lugar realmente increíble. Se trata de la laguna Arhuaycocha. Se encuentra a 4.450 metros y la forman los glaciares que hay a su alrededor
Este lugar está formado también por infinitas piedras de todos los tamaños
Lo más sobrecogedor de este lugar son los bruscos e impresionantes sonidos que rompen el silencio cada dos por tres. Se trata del ruido que producen los continuos aludes y desprendimientos que tienen lugar en las montañas de los alrededores
Las vistas que se contemplan en este lugar son indescriptibles... montañas colosales desafían al cielo y en la tierra unas aguas azul celeste por las que navegan a su aire bloques de hielo continuamente
En la laguna de Arhuaycocha hay una tradición: todo el que llega debe hacer un montículo con las piedras que hay por todas partes y pedir un deseo... no sé si se cumplirá, pero es muy bonito observar el conjunto de pequeñas pirámides que hay por todas partes e imaginar los miles de sueños y deseos que se han pedido en un lugar tan idílico.
Como os podéis imaginar, yo también me dediqué a colocar mi montoncito de piedras... nunca se sabe y entretener, entretiene mucho.
Mientras tanto, Jorge prefirió dedicarse a la contemplación del lugar...
¡Y por fin acabé mi montoncito! (aunque en la foto apenas se aprecia...)
¡Ale! En esta otra foto se ve mucho mejor!
Y por último una foto de parejita antes de abandonar este maravilloso lugar!!!
Poco a poco fuimos volviendo por donde habíamos venido hasta llegar de nuevo a Taullipampa para seguir nuestro recorrido por Santa Cruz.
Tras atrevesar de nuevo el serpenteante camino que va a dar al campo base del Alpamayo hicimos una pequeña parada para comer y reponer fuerzas y continuamos de nuevo caminando hacia Llamacorral.
En esta zona la nieve había desaparecido casi por completo y lo que había por todas partes eran balsas de agua y lagunas inmensas como las de Hatun Cocha o Ichic Cocha que había que ir sorteando continuamente. En estas lagunas han una gran variedad de patos.
Aquí la vegetación comenzaba a ser cada vez más llamativa. Poco a poco iban surgiendo nuevos colores que cambiaban radicalmente el paisaje al que nos habíamos acostumbrado
Los verdes se entremezclaban con amarillos, rojos, lilas... las flores comenzaban a inundar el lugar y ofrecían un espectáculo maravilloso
Los que parecían más agradecidos con el cambio de paisaje y también de temperatura eran los burritos y caballos que hacían la ruta
Justo antes de llegar hasta el siguiente campamento, que se encontraba situado en Llamacorral, a 3.800 metros, me encontré con el animal más bonito que vi durante toda la caminata y probablemente durante todo mi viaje a Perú... ¡Un burrito pequeñito!!
¡Son increíblemente buenos, bonitos y dulces! Porque no me cabía en la mochila, que sino...
Después de caminar unas ocho horas, por fin llegamos al que iba a ser nuestro último campamento del trekking. Jorgito en esta ocasión estaba molido y nada más llegar se metió en la tienda para descansar
Yo preferí jugar un poco con mis grandes amigos del viaje. ¡Hay que ver lo que les gusta a estos animales las mondas de naranjas!
Junto al campamento de Llamacorral, unas mujeres locales habían puesto un chiringuito con cervezas... adoro a estas mujeres!!
La tercera noche del trekking fue muy amena. Estábamos a punto de concluir la caminata ya que al día siguiente sólo nos quedaban cuatro horas más o menos de marcha, así que alargamos algo más de lo normal la velada y estuvimos charlando con todos nuestros compañeros de viaje.
Cuando nos despertamos al día siguiente descubrimos que la batería de la cámara éstaba casi completamente agotada, así que no pudimos plasmar los maravillosos lugares por los que pasamos antes de llegar al punto final del trekking.
Para que os hagáis una idea, este último día discurre por un camino que va todo el tiempo junto a un precioso río. La vegetación ya ha cambiado completamente y lo más destacado son las preciosas cascadas con las que te encuentras de vez en cuando.
Por si fuera poco, esta parte del trekking es sobre todo descenso, así que antes de que nos diéramos cuenta habíamos llegado ya al punto final del recorrido, el poblado de Cashapampa que se encuentra situado a 2.900 metros.
Se trata de un poblado pequeñito y completamente andino así que es una maravilla contemplar las costumbres de esta gente.
Cashapampa es pequeño pero gracias al trekking de Santa Cruz son numerosos los coches, camionetas, camiones y autobuses que pasan a diario por aquí.
Nada más llegar los burritos por fin pudieron dejar todos nuestros bultos, que no eran pocos. Ellos seguro que iban a estar más felices, pero a mi me iba a dar mucha pena despedirme de Chiquito y Francisco!
¡Y ahora viene una foto reveladora! Jorgito estaba más cansado de lo normal en este trekking pero tenía una razón de peso. El pobre había hecho todo el trayecto con un dedo congelado, ya que acabábamos de llegar del volcán Chachani! Y aún así, apenas se quejó... Aquí está su dedo...
Mientras esperábamos a que llegara el vehículo que nos iba a llevar de nuevo a Huaraz fuimos contemplando cómo era la vida en este lugar y, de repente, nos quedamos alucinados! Mirad bien esta camioneta porque en ella va todo lo necesario para montar una juerga como Dios manda! unos bafles tamaño gigante y miles de cajas de cerveza para que nadie tenga sed! está claro que aquí se lo montan de maravilla!
Una última foto de mis amigos los burritos...
Una última foto del gran grupo que hicimos este trekking...
Y tras tres horas en una furgoneta llegamos de nuevo a Huaraz! en esta ciudad hay unos atardeceres increíbles...
Ya habíamos concluido este maravilloso recorrido, pero antes de cerrar página nos volvimos a juntar todos en la agencia donde habíamos contratado el trekking para celebrar a lo grande esta excelente aventura! Eso sí, en esta ocasión y sin que sirva de precedente, cambiamos la tradicional cerveza por la bebida del país... arriba el Pisco!!!
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1 comentario:
He disfrutado muchisimo con estos 3 reportajes sobre el treking.
Vaya lugares más maravillosos, no puedo evitar sentir una sana envidia por vosotros, viendo como disfrutasteis de estos fantasticos lugares.
Saludos
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