miércoles, 25 de abril de 2007

Hielo Sur, Patagonia. Enero 2005. 3ª Parte: Por tierras de Mordor

Tercera parte de esta sin par aventura que narra los avatares y cuitas de nuestros amigos, que deberán recorrer en una jornada agotadora las inhóspitas tierras de Mordor, o por lo menos el lugar más parecido que he visto en mi vida.
Después de dormir una noche más con la espalda pegada al frío hielo, los aislantes aquí sirven de poco, el toque de diana nos puso en funcionamiento y tras recoger el campamento nos pusimos de nuevo a caminar. A nuestra izquierda las afiladas cumbres del Cordón Adela ofrecían impresionantes vistas, como la de este glaciar que fotografía Jesusín.
Hacia el otro lado, la mirada se perdía en el horizonte, donde la estampa de Jorgito es la viva imagen de la soledad.

Después de unas horas de marcha, siempre buscando la salida por el glaciar Viedma, tuvimos que cambiar las raquetas por los crampones y encordarnos por si las grietas, a pesar de que eran bien visibles.


Por fin, abandonamos el hielo y comenzamos a caminar por la morrena del glaciar, la verdad es que uno se sentía muy pequeñito andando por aquí.

Al superar un repecho, apareció una laguna, cuyo nombre no aparecía en nuestro mapa, no sería la última que nos encontraríamos en esta larga jornada.
Desde allí pudimos echar una última mirada al Hielo Sur, convertido ya aquí en el glaciar Viedma.
Y frente a nosotros, allí, el Paso del Viento. Pero para alcanzarlo antes debíamos atravesar este pedregal, digno de las mismísimas tierras de Mordor. Yo, por si acaso, miraba a todos lados piolet en mano esperando que, de un momento a otro, apareciera un orco u otro maligno servidor de Saruman.

Tras otro repecho, otra laguna, la de los Esquíes. Sus aguas turquesas hipnotizaron a Andrés llevándole a un éxtasis de ensoñación, momento en el que fue sorprendido por mi cámara.
Otra subida y otra laguna... como en el Día de la Marmota, vamos. Pero, ¿por aquí no habíamos pasado ya? Que no... que esta es la laguna Ferrari

Las luces de la tarde en el verano austral producían reflejos y reverberaciones en el agua de la laguna...

...y por fin, allá abajo, por un recoleto senderito junto a un arroyuelo que serpenteaba jugetón aquí y acullá, la laguna del Refugio, nuestra meta.

Pero, ¿qué ven mis ojos? Una construcción con cuatro paredes y un tejado. ¿Será un espejismo? ¿Una ilusión fruto de las más de diez horas de caminata? No, el refugio era real y en él dormimos sobre literas de madera, todo un lujo...

...como relajarse de esta manera. Es curioso, hay que irse al culo del mundo para poder apreciar los pequeños placeres de la vida, como caminar descalzo por la hierba. Clavadito al Richard Gere en "Pretty Woman", je, je.

Este ha sido el breve pero conmovedor relato de una etapa más de la
Vuelta al Hielo Sur con orejas
que continuará cuando tenga un rato libre entre mis múltiples ocupaciones.
Próximo objetivo cruzar el Paso del Viento.
¿Qué nuevas y emocionantes aventuras vivirán nuestros jóvenes amigos? No te pierdas el próximo capítulo, próximamente en el ordenador que te pille más a mano.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Oye Borja, un comentario técnico de la minoría discapacitada, en este caso yo mismo. Aunque te rías, mi humilde petición es: ¿puedes cambiar el color de las frases destacadas (comentarios, títulos, etiquetas)? Como sabes, soy un poco daltónico y me cuesta verlos. En fin, que son sugerencias para hacer el blog más accesible a todos los humanos con ojos, y no sólo con orejas.

El fratello

Anónimo dijo...

Aquí la Eva (Castaño): Suscribo el comentario anterior. Por lo demás, todo muy bien, empezando por el nombre. Se agradece esto de que nos saquéis de paseo por las altas montañas cual Heidi, sin tener que sufrir las odiosas agujetas y sin perder la dignidad en cualquier repecho. Por cierto, soy de las que opinan que esto mejoraría si saliéseis más ligeritos de ropa pero podré soportar la espera mientras haya nieve.

Borja dijo...

A pesar de lo que digan los corruptos de la oposición, en este blog impera la democracia y vuestras voces, querido hermano, querida eva, han sido escuchadas.
Ahora que lo pienso, esas letras naranjas deben de ser la causa de las estrellitas de colores que veo cuando cierro los ojos.
En breve acometeré la reforma.
Por cierto Eva, aunque tu voto es tan válido como cualquier otro, parece que el público prefiere la primera opción. En fin, ya veremos, los resultados al final de la encuesta.
Besos para todos.

Anónimo dijo...

Hola, soy la prima mayor. Es mi primera vez de enganche a lo que los modernos llamais blog, yo diría diario con fotos. Me alegran la vista los horizontes tan limpios, me oxigena la mente los comentarios tan audaces y vivo en un sin vivir como madre que soy. Vamos, a casa, que vais a coger frío. Yrene Salinas